Gracias al trabajo y compromiso del gobernador, Victor Manuel Tamayo Vargas por la salud del departamento, 45 niñas, niños y adolescentes de Risaralda que han sufrido deformidades congénitas serán operados de las manos por primera vez, por medio del programa “Manos a la Obra”, liderado por la Asociación Colombiana de Cirujanos de la Mano.
Esta jornada sin precedentes contará con la participación del doctor español Francisco Solano, considerado por las revistas científicas como el mejor microcirujano de la mano del mundo, acompañado de cirujanos internacionales y los mejores médicos del país.
María Elene Ruíz, Gerente del Hospital Universitario San Jorge de Pereira destacó la importancia de este programa: “gracias a la iniciativa del señor gobernador estos niños y niñas que han tenido dificultades para acceder a estos especialistas van a tener ahora nuevas oportunidades en la vida por este hecho histórico para nuestro departamento”.
Adicionalmente, otros 10 niños de Caldas, Quindío y de países como Ecuador, Panamá y República Dominicana, cuyos padres llevan meses y hasta años esperando ser incluidos en esta jornada, que es totalmente gratuita también se verán beneficiados con este programa que por tercera vez se realiza en Colombia.
Aida García, presidenta de la Asociación Colombiana de Cirujanos de la mano y líder de esta campaña agradeció porque el Hospital Universitario San Jorge fuera elegido para acoger esta jornada que se realizará en dos días (lunes y martes) dedicados exclusivamente a realizar este tipo de operaciones:
“Tenemos que agradecer que nos hallan brindando este espacio, porque para poder hacer una jornada humanitaria con 45 niños en dos días necesitábamos un determinado número de horas quirúrgicas, la cuales cumple el hospital. Vamos a tener cuatro quirófanos los cuales van a funcionar 12 horas, con cuatro equipos quirúrgicos con líderes en cada grupo y eso lo podemos desarrollar gracias a que nos han facilitado este hospital que además nos brinda todas las garantías”.
Por su parte, el doctor Francisco Soldado se refirió a lo que implica llevar a cabo este tipo de jornadas “primero tenemos que resaltar el componente humanista, el ayudar en este caso a niños y el segundo el científico, porque nos reunimos expertos de varios sitios del mundo e intercambiamos experiencias”.
Hillary Vega, una madre de familia quien viajó desde Panamá con su hijo Luis Wong, entre lágrimas, aseguró que la operación de su pequeño, le cambiará la vida a él, y a toda la familia.
“Estoy muy feliz porque después de cuatro años, gracias a esta labor tan bonita del gobernador y de los médicos, mi hijo va a llevar una vida normal y más porque él es un niño muy activo y a la edad que tiene me dice que le hacen falta varios movimientos en su mano para agarrar, para jugar para muchas otras cosas”.
Es de resaltar que todos y cada uno de los que hacen parte de este programa son un grupo de voluntarios quienes ponen a disposición su experiencia, su tiempo y dedicación para de manera gratuita impactar en la vida de quienes más lo necesitan.
