La CARDER reconoce el compromiso de las empresas del departamento que realizan la transformación y comercialización de madera y guadua cumpliendo con la legalidad y responsabilidad ambiental.
A través del proyecto “Modelo de Negocio Forestal” que lidera la CARDER con el apoyo técnico y financiero de la FAO-UE FLEGT, se entregaron herramientas y kits de bioseguridad a 30 empresas de los Municipios de Pereira y Dosquebradas dedicadas a la transformación y comercialización de madera y guadua en el departamento de Risaralda.
“Para nosotros es muy importante reconocer ese compromiso de solidaridad, por eso hacemos un reconocimiento a aquellas empresas en compañía de la FAO a través de la Unión Europea y de la agencia encargada de las buenas practicas agroforestales ambientales sostenibles, para que estos elementos les sirvan a ellos para todo el proceso industrial y comercial que tienen desde sus nichos de mercado asegurado”, dijo el director general de la CARDER, Julio César Gómez Salazar.
‘Propiedades físico mecánica de dos especies maderables del bosque natural’, ‘Directorio comercial de actores de la cadena productiva de la madera’, ‘Estudio de las condiciones de mercado para la comercialización’, fueron algunas de las cartillas que se entregaron, además CDS con formación para fortalecer la responsabilidad ambiental de cada una de estas empresas.
Felipe Vicente representante de la empresa Súper Maderas, la cual está dedicada a la transformación y comercialización de madera para ensamble de estibas y guacales para el sector industrial, fue uno de los beneficiarios: “el apoyo por parte de la CARDER ha sido informativo, nos han dado unas bases y cimientos sobre el tema forestal, conocimientos y experiencias, aparte de esto nos están dando este aporte de un kit forestal, el cual nos va a servir mucho para todo lo que tiene que ver con la capacitación, el tema de las humedades y la información que podemos obtener de todas las maderas”, dijo.
La Corporación continúa poniendo a disposición a todos sus profesionales para que aquellos que trabajan en la producción de bosques resuelvan sus dudas acerca de la legalidad de la actividad que desarrollan y no vayan a incurrir en delitos ambientales.